1. Chapter 1 (1/2)
una conexion más allá del tiempoera una maana de invierno, la nieve parecia revestir aquel paisaje en su manto blanco, que inundaba las calles de tokio, el cielo se teia en una tonalidad grisácea y desde su infinidad caian los copos de nieves, envolviéndose luego en aquella vestimenta inmaculada que se habia empeado en cu
ir por completo todo sitio por el que pasase; nieve, frio y cielo casi incoloro, de no ser por los objetos
illantes y las coloridas luces que se encontraban decorando las casas, las tiendas e incluso los caminos, aquella maana simplemente hubiera entristecido a cualquiera.sin embargo, aquellos vivaces adornos con tintes vi
antes, aquellas luces parpadeantes, contrastaban con esa coloracion blanca y gris,
indándole un aspecto muchisimo más alegre, acallando las penurias de los corazones de las personas, que, sin dudarlo, se emergian a pasear por las ciudades, a dar sus ultimos retoques a los adornos o comprar diversas comidas o algo que hiciese falta; porque siempre solian esperar hasta ultimo momento? y es que, a pesar de todo, ese dia, 24 de diciem
e era vispera de navidad.en este "mágico" dia, las familias se reunian, en espera de cele
ar todos juntos, en una convivencia apacible, degustar cada uno de los platillos que estuvieran a su alcance, sea lo que fuese que preparasen, lo unico que importaba era disfrutar ese momento, que, desgraciadamente, puede que no siempre se repitiese. pero, familia unida o no, aunque sea una esperanza, un deseo, algo...debia alegrar esa navidad, una carta escrita a papa noel?, en ella inundada las esperanzas de un nio de recibir aquello que tanto deseo, se cumpliria?, solo optaba esperar, las esperanzas era lo ultimo que se perdian, pero realmente podia ser asi?perdido en una similar reflexion se encontraba un joven de al parecer unos dieciocho aos, sus ojos azules, se veian inmersos en una soledad y un pensamiento que solo el entendia, su melancolica mirada no paso desapercibida por nadie, ni mucho menos por la nia que ahora tironeaba de la manga de su a
igo.— que ocurre hermano seiya? —.inquirio la nia preocupada por la actitud de su hermano mayor— te encuentras bien?el muchacho se sorprendio momentáneamente, realmente tanto se notaba aquellos sentimientos negativos en su rostro que hasta su propia hermana lo noto?—no te preocupes kakiu —.le respondio con una sonrisa cálida para tranquilizarla —.estoy bien —finalizo acariciando gentilmente la cabeza.—pero... —la nia de siete aos de edad no lucia nada convencida—. te ves triste —afirmo a la vez que sus ojos azules, similares a los de seiya, comenzaron a cristalizarse.el joven se agacho para quedar a la altura de la nia, le siguio acariciando la cabeza, en un intento de tranquilizarla para que no rompiera en llanto.—no seas tonta kakiu —le decia—. solo pensaba en si nos alcanzaria el dinero para comprar todas exquisiteces que llevamos en nuestras bolsas —mintio—. de lo contrario deberiamos dejar algo, solo pensaba en eso —término de mentir, tratando de que su actuacion fuese aun más convincente con su forzada sonrisa. kakiu obviamente sabia que lo que su hermano le decia no era para nada cierto, y ante ella era un muy mal actor, siete aos hacia que estaba junto a él, un lazo demasiado fuerte se habia formado entre ambos como para desconocer las picardias, las costum
es, las manias del otro, pero por so
e todo, los sentimientos guardados tras verdades disfrazadas y sonrisas falsas. pero, la hermana menor sabia que no llegaria a nada el asunto, sin importar cuantas veces le preguntase, seiya seguiria actuando bajo esa máscara de felicidad y despreocupacion, como si fuese un ser de piedra, alguien que tenia todo resuelto y no habia nada que pudiese hacerlo decaer, alguien fuerte...la nia sabia que solo era una vestimenta contra el miedo, una proteccion contra lo que realmente resguardaba tras esa fortaleza que mostraba hacia los demás.—mira, avanza la fila —esta vez fue seiya quien la desperto de la ensoacion reflexiva en la que se encontraba sumergida—vamos —obedecio, hacia ya tiempo que se encontraban en el supermercado, al parecer, finalmente podian salir de alli.una vez fuera de aquel sitio de puro consumismo, ambos se dirigieron hacia su casa, en su recorrido, sus huellas quedaban impresas so
e la nieve.— mama, ya llegamos! —grito alegremente kakiu, al ingresar ambos a la vivienda, seiya cerro la puerta detrás.—hola, amores —dijo la madre dulcemente a ambos— como les fue?, consiguieron comprar todo? —pregunto.—asi es —respondio tranquilamente seiya—.— en serio? —la mujer parecia bastante sorprendida por la noticia, sin embargo esa sorpresa la alegro—que bueno, crei que no seria dinero suficiente.seiya entrego las bolsas que contenian alimentos a su madre, ella bien sabia que haria con ellos, sin embargo al mirar a su hijo, no pudo evitar reirse.— qué ocurre? —pregunto extraado el primogénito, por la reaccion de su madre.—tu cabello...—respondio sin poder detener su risa— se ha convertido en una capa blanca, donde se ha ido tu color negro azabache?—.al mirar su largo cabello, que le llegaba hasta por debajo de la cintura, atado en una coleta, seiya comprobo que se habia teido de blanco gracias a la nieve y él sin saberlo, sino se le hubiera mencionado su madre.finalizada la risa de su madre, esta se dispuso a continuar con las preparaciones para el festejo, kakiu decidio ayudarla, seiya también, bueno, al menos hasta que una pregunta se instalo en su mente.— donde esta papa? —pregunto seriamente.—no lo sé —respondio su madre—. supongo que volverá pronto —su voz le temblaba, cuánto tiempo seria pronto?—nuevamente, es lo mismo —la voz del primogénito se oia furiosa—. igual que en todos los aos el no vendrá...—seiya, no digas eso, tu padre vendrá...— si?, no me digas, como volverá?, borracho? —la interrumpio sarcásticamente—.seguramente se debe de haber ido de copas, prefiere eso a pasar las fiestas en familia —recalco con ira.la seora se quedo callada, solo bajo la cabeza, fue incapaz de responder ante a una acusacion totalmente cierta. ante la reaccion de su progenitora, seiya comprendio que la habia herido, que podia hacer ella?, acaso habia una razon para desquitarse de ese modo?, quiso disculparse, sin embargo, sus movimientos solo atinaron a salir corriendo de alli, se dirigio hacia la puerta, la a
io y sin tener un destino fijo en mente, atraveso aquella delgada linea que lo separaba de su hogar y del mundo de afuera, corrio, corrio, corrio sin saber hacia donde.en su lugar habia dejado a dos mujeres muy confusas y preocupadas, ni la madre ni la hermana, que obviamente habia presenciado todo, se esperaban esa reaccion por parte del joven, noemi, el cual correspondia al nom
e de la madre, penso en seguirlo, sin embargo cuando se encamino hacia la puerta la figura de su hijo mayor ya se habia perdido, no servia de nada salir en su busqueda, dejo abierta la puerta, y se coloco nuevamente al lado de su pequea hija, para seguir con los preparativos, ambas cabizbajas, sumidas en un silencio, ambas tristes... . . .en un sitio desconocido, el viento golpeaba fuertemente y la nevada no daba tregua, sin embargo, el frio, esos componentes climáticos que causaban molestia y helaban cada parte del cuerpo, no significaban nada para seiya, que termino sentado detrás de unos edificios, y no porque se hubiera cansado de correr, para nada su buena complexion atlética lo permitiria, ni siquiera el mismo sabia la razon de porque se detuvo en ese lugar, quizás, después de todo, si estaba cansado; realmente cansado, no cabia duda, pero agotado del pasado, que volvia al presente y se repetia una y otra vez, fatigado de la misma historia, nuevamente sucederia esto?, él lo paso en su infancia, pasaria en la de su hermana también?, no podria hacer nada para evitarlo? se sentia inutil; al parecer el destino era perseguido constantemente por las som
as del pasado, y queria provocar el mismo sufrimiento de nuevo, no era justo simplemente. su piel, siempre blanca, ahora se encontraba enrojecida, se notaba en su rostro, era por el frio que se apoderaba de él o por un flujo de sentimientos negativos que envolvian su ser?, se quedo alli, quien sabe por cuánto tiempo, pudieron haber sido horas, quizás minutos, ignorante ante el paso del tiempo, solo fue devuelto a la realidad al escuchar unos extraos ruidos y risas, parecian provenir del interior del edificio, les hizo caso omiso, pero al ser tan molestas decidio retirarse del lugar, se irguio y comenzo a caminar.—"deberé volver a casa?" —se pregunto mentalmente—. "quizás sea lo mejor, me disculpare con mama y seguiremos igual que siempre, como siempre fue..."—penso entristecido, mientras se dirigia hacia su hogar. sin embargo...— feliz navidad, feliz navidad —se oian unas voces chillonas repetir una y otra vez la misma frase—. feliz navidad, feliz navidad —era estremecedor, esa entonacion ha
ia puesto de los nervios a cualquiera, no solo eso, sino también los dueos de esas voces.—qué demonios? —se alarmo seiya, al ver como un grupo de duendes se encontraban girando, en una ronda, repitiendo una y otra vez "feliz navidad, feliz navidad".apenas el joven retrocedio unos pasos, aun alarmado por lo que su vision captaba, las miradas de los cientos de duendes se volvieron hacia él y con una sonrisa perversa, comenzaron a perseguirlo. sus instintos se activaron, y sin dudarlo ni un momento, seiya comenzo a correr, en direccion hacia su hogar, tomando distintos atajos y desviaciones para trata de detener a esas extraas criaturas, que rayos querian?una vez llegado a su hogar, cerro la puerta tras de si y alzo rápidamente su vista para comprobar la situacion actual de su hermana y madre, al mirar, vio que el sitio en cuestion se encontraba en un completo caos, todo desordenado, alimentos por alli, ropa por allá, nada en su lugar, y en el medio de aquel desorden estaba kakiu arrodillada, temblando a
azando a su perrita husky, anouk. el rostro de la nia era la definicion del miedo totalmente marcada, seiya se quedo paralizado al verla asi, sin embargo, se dirigio rápidamente hacia ella, se agacho a su altura y la agarro de los hom
os.—kakiu, que ha ocurrido?! —pregunto desesperado, sin embargo, kakiu no paraba de temblar y al parecer, no oia a su hermano—. kakiu!, dime que ha ocurrido!la nia comenzo a tartamudear, apenas el terror en el que se encontraba sumergida le permitia articular algo decente, pero, su vision, al parecer capto la presencia de su hermano, quien la miraba terriblemente preocupado.—se-seiya—dijo asom
ada, tartamuda aun por el miedo—.seiya! —sollozo para finalmente llorar so
e el pecho de su hermano, quien la a
azo, anouk solo seguia entre los
azos de la nia.el llanto de kakiu fue aminorando, su respiracion agitada y sus temblores fueron cesando, una vez que seiya sintio que estaba más calmada, decidio hablar con ella.—kakiu, ahora dime, qué es lo que ocurrio? —seiya intentaba mantenerse calmado, a pesar de la confusa situacion.la pequea miro a su hermanos, apreto fuertemente los puos, respiro profundo y con un dolor punzante en el pecho, a causa de los sucesos ocurridos que solo ella habia presenciado, comenzo a relatar:—ve-veras, seiya, ma-mamá fue —aun le costaba hablar, al recordar los acontecimientos recientes—. es-estábamos las dos preparando las comidas y de repente la casa comenzo a ser atacada por miles de duendes, entraron aqui yo y mama no sabiamos que hacer, solo mama agarro mi
azo, y comenzamos a a
irnos paso para salir de aqui, pero, yo me tropecé y cai, ante mi caida me desprendi de la mano de mama, y los duendes comenzaron a acercarse a mi, pero, pero, ma-mamá se —comenzo a temblar nuevamente y las lágrimas se apoderaron nuevamente de sus ojos, seiya intento calmarla, sin embargo, la pequea decidio continuar con el relato, quien sabe de donde saco fuerzas para lograrlo—. mama se interpuso, y, y, y e-ella se —su voz se iba acortando, su respiracion se agitaba y las lágrimas caian violentamente por sus mejillas—. se convirtio en duende! —finalizo el relato a la vez que comenzaba a toser y a llorar fuertemente—. se puso encima mio para evitar que los duendes me hicieran algo y por mi culpa ella salio perjudicada! —.se culpaba una y otra vez, siendo incapaz de controlar su llanto, anouk la miraba, los ojos de la perrita también reflejaban tristeza, mientras que seiya intentaba procesar la informacion que le habia contado su hermana, cuando logro entender que prácticamente todo estaba patas arriba tomo el rostro de su hermana entre sus manos y con sus pulgares le limpio las lágrimas.—tranquila —le dijo—.todo estará bien y le acaricio suavemente la cabeza, kakiu, cerro los ojos ante el contacto, intentando tranquilizarse.—estoy bien —le dijo con una leve sonrisa—. no te preocupes.— puedes continuar con el relato? ——pues...luego de eso no se bien que ocurrio, solo que empezaron a alejarse de mi, no me hicieron nada.— porque? —se pregunto seiya sin comprender, obviamente que no le sucediera a nada a su querida hermana lo alegraba, pero, porque a ella no le hicieron ningun dao?—no lo sé —respondio—. ni a mi ni a anouk, por suerte, pero mama...—el joven de orbes azules fruncio el ceo, apreto fuertemente los puos, qué demonios pasaba?, suficiente ya tenia con los problemas repetidos en todas las navidades!, ahora debia sumársele uno nuevo, y para colmo con criaturas rarisimas, con duendes?!, esto lo sacaba de sus cabales, sin embargo, sabia que debia hacer lo necesario para proteger a su hermana y a su mascota, pero, la pregunta en su cabeza aun rondaba, como es que a kakiu no le habia ocurrido nada?— sabes?, yo creo que papa noel me protegio —solto kakiu de repente.hubo un momento de silencio, ambos se miraban fijamente, no obstante seiya cayo en la cuenta de lo dicho por su hermana, y simplemente, creyo que ella alucinaba.—kakiu, pero se puede saber que dices? —cuestiono incrédulo.— digo la verdad! —se enojo, al ver que su hermano no parecia creerle— el me salvo!el joven habia olvidado que su pequea hermana aun creia en la existencia de aquel hom
e regordete que llevaba regalos a cada nio del mundo en un sola noche, era mágico, recordo los sacrificios que el mismo habia hecho para mantener viva esa ilusion. a pesar de no tener una situacion economica favorecedora, debido a sus altas calificaciones y sus grandes habilidades fisicas, seiya recibio una beca para poder inscribirse a la universidad que deseara, y asi fue, él se inscribio en la universidad de educacion fisica de tokio, pero, aquel monto de dinero que habia recibido gracias a su constante esfuerzo, para seiya significaba mucho más, una ayuda a la familia, una ayuda dirigida so
e todo a su pequea hermana.l se habia encargado, mayoritariamente de comprar los regalos para ella en cada navidad, manteniendo con vida la ilusion y la alegria de la pequea al recibirlos, cada vez que veia en el rostro de su hermana formularse una sonrisa una calidez se instalaba en su interior, por eso lo decidio, no dejaria que su hermana fuera despojada de esa grata felicidad a tan temprana edad como el, despojada de la ilusion, de la esperanza, de los deseos y los sueos, sepultada bajo una miserable sensacion de soledad, abandonada de cario, una tristeza en la que él se vio inmerso en la mayoria de su infancia, no permitiria que a ella le ocurriese lo mismo, a pesar del comportamiento de su padre hacia ellos, siempre tan frio e indiferente, despreocupado hacia sus hijos y los recuerdos so
e el que inundaban su mente no era de los mejores; lagrimas, terror y golpes, ya habia sido suficiente para el. su hermana no pasaria lo mismo.—entonces, l te protegio? —.— si! —respondio animada.—lo importante es que estas bien y también anouk —sonrio cálidamente—. "bien, puedo entender que a anouk no le ocurriese nada, tal vez eso no haga ningun dao o cambio en los animales, lo que sea que haga convertir a las personas en duendes —pensaba—. "pero, sigo sin entender como a kakiu no le ocurrio nada, bueno lo importante ahora es salir de esta"— finalizo su pensamiento, rindiéndose en una busqueda de explicacion para el bienestar de kakiu.se decidio a buscar una salida a esto, pero, como lo haria?, ni el mismo lo sabia, lo unico que queria era recuperar a su madre, para poder pasar una navidad, aunque sea ellos tres, y calmar la tormenta que esta vez apoderaba a su hermana, aun temerosa y triste.—pequea, sé que esto puede ser doloroso, pero de cualquier manera debemos buscar a mamá, no hay de otra, al parecer somos los unicos que no hemos sido convertidos en duendes, no nos queda alternativa —sentencio firmemente, ante la mirada asustada de su hermana, quien, temerosa pero segura afirmo con la cabeza.—pero te equivocas, hermano seiya, no somos los unicos —el muchacho se sorprendio ante tal declaracion, no pensaba que aun habia gente normal, por asi decirlo, a parte de ellos.— enserio? —pregunto esperanzado— quién más hay a parte de nosotros?— el! —dijo sealando hacia la pared.— quién? —cuestiono seiya confundido.— el! —volvio a repetir la nia, sealando el mismo punto en la pared, en el cual, al parecer, no se encontraba nadie.bien, esto era grave, primero los mismos problemas de todas las navidades, luego una invasion de duendes locos, ahora su hermana veia cosas, o al menos eso creia él.—escuchame, kakiu —el mayor trataba de no sonar incrédulo o incluso grosero—. no veo a nadie, qué te parece si jugamos luego? —definitivamente él solito se exponia ante los demás, como le dices a un nio que te afirma la existencia de algo o alguien es un juego?la pequea se contenia las ganas de llorar nuevamente, no solo ocurre una catástrofe, ahora su querido hermano no le creia.seiya, al ver el estado de la pequea, intento mejorar la situacion.—está bien, está bien, yo te creo —se apresuro a decir nervioso—solo es que no veo al ser que me mencionas.— en serio me crees? —ahora ella era la que no le creia.—pues claro que si —rio nerviosamente, rogando que la pequea no volviera a romper en llanto.—está bien —se dirigio hacia el lugar anteriormente sealado por ella, y le tomo de la mano a alguien, al parecer, y lo llevo junto a su hermano, quien aun miraba todo completamente estupefacto—. l es de quien te hablo, hermano, él es papa noel —.podriamos decir que seiya, si anteriormente habia podido procesar una cantidad de extraa informacion, pues de esta era incapaz, o al menos le estaba costando mucho más que las veces anteriores, realmente su hermana veia a ese ser?kakiu sonreia, bajo a la perrita ya que hacia rato que se encontraba en sus
azos, esta se sento del lado izquierdo, de donde supuestamente se encontraba papa noel, moviendo su cola de un lado hacia otro, en muestra de felicidad y simpatia, bien, la husky ahora también tenia visiones, qué demonios pasaba aqui?—kakiu, no digo que mientas, pero, yo realmente no veo a nadie —dijo serio, tratando de no herirla.la nia giro el rostro, al parecer, el hom
e regordete le habia dicho algo.—l dice que no puedes verlo...porque no crees —las ultimas pala
as las dijo realmente triste, y con un gran dolor.— eh? —l no podia creer lo que escucho, aunque era cierto, el hacia mucho habia dejado de creer en papá noel, un recuerdo del porque quiso invadir su mente, seiya trato de alejarlo, sin embargo, esa memoria quedo instalada en su mente y al emerger aunque sea un poco, le provocaba un intenso dolor, al rememorar, su expresion cambio a una dura y fria; triste y miserable; una expresion dolorosa que su hermanita nunca antes habia visto. ella se estremecio ante la mirada de seiya, comenzo a temblar nuevamente, creia haber dicho algo malo, y no era su culpa, solo que, sus pala
as fueron el nexo que rea
io un amargo recuerdo de seiya.no se supo durante cuantos minutos se prolongo el silencio, la amargura en el rostro de su hermano; solo sabia que se le hizo interminable...luego de ese instante que parecio eterno, seiya, al parecer se habia percatado de la situacion actual, intento de todo modo posible desaparecer esas facciones crudas que parecian haber deformado sus rasgos, siempre tan gentiles y que transmitia una calidez, por fuera; inteligente, despreocupado, y algo presumido; por dentro un sinfin de sentimientos dolorosos que podian llegar a ser irreconocibles...con dificultad, logro, aunque sea solo un poco, retornar aquel rostro apacible, los temblores de kakiu fueron cesando.—disculpame —suspiro—. es verdad, yo no creo en papa noel —afirmo, con su expresion nuevamente tornándose fria.—pero —la menor, apenas si era capaz de comprender las pala
as de su hermano—porque no crees?—pregunto con la voz que
ada—hermano, tienes que creer! —en un tono de ruego, al borde del llanto.—no sé, no puedo —rogo interiormente que kakiu no comenzara a interrogarlo—.solo, no creo...— es que, si no crees no sirve de nada, no podremos salvar a nadie!— a qué te refieres?— es que, papa noel me dice que los milagros suceden solo si crees firmemente en ellos, y como tu no crees no podremos hacer nada!bien, la conversacion no tenia ni pies ni cabeza, ahora se suponia que el joven debia creer en algo que probablemente ni siquiera existiese?, pero, si tomamos en cuenta la creencia de la nia en ese ser mágico, tan fuerte podria ser como para llegar a verlo, o simplemente una mentira la estaba encegueciendo? kakiu, se dio cuenta que su hermano realmente no le creia ni media pala
a, asi que decidio comprobar que todo lo susodicho era cierto, y no una simple creencia de nia pequea.por sus movimientos, parecio haber pedido a papá noel que se agachara a su altura, susurrándole algo en su oido, que estaria planeando?, luego de unos momentos de incertidum
e, miro fijamente a seiya.—hermano —le dijo en un tono potente, nada usual en ella—.aqui esta papa noel.y, junto a la menor comenzo a caer un monton de
illo, aparecido de la nada, nube blanca, adornos navideos, destellos mágicos y entre todo ese revoltijo de fantasia, se diviso una figura regordeta, vestida completamente de rojo, con algunos detalles en blanco, su ropa consistia en un saco, unos pantalones y unas botas negras, su conjunto lo finalizaba el toque de un som
ero, en forma triangular, adornado con unos detalles en blanco, al igual que el resto de su ropa, con una pelotita blanca en la punta que destacaba.un hom
e viejo, de tez clara, con una gran barba blanca, hizo acto de presencia.— ves? —le pregunto feliz kakiu a seiya—te lo dije, aqui esta!si, bien el joven de cabello azabaches, apenas podia visualizar algo fuera de lo comun, era una leve transparencia, definitivamente, seguia sin ver casi nada.—kakiu, realmente no soy capaz de distinguir aquello que mencionas —el rostro de la nia comenzo a entristecerse de nuevo—.pero, no por ello no creeré en ti —la detuvo antes de que comenzara a llorar—.sin embargo, creeré en tus pala
as, mas no en tus visiones—afirmo.—no son solo visiones, seiya —inflo los cachetes, enojada por la incredulidad de su hermano—.es mucho más que eso.seiya suspiro, realmente no valia la pena seguir el curso de la conversacion, visiones o no, necesitaban ayuda y si el "creer" era el unico poder que tenia, seria complicado, mas no imposible.—bien, kakiu, qué es lo que te dice papa noel? —cansado de todo este ajetreo, decidio preguntar, quizás a algun lado llegarian.— qué es lo que quieres saber? —le respondio con otra pregunta—. el primero necesita saber eso.—bien, pues entonces que se prepare porque estoy a punto de interrogarlo cual policia a criminal —tomo aire y comenzo— qué es lo que ocurre aqui?, porque todos, a excepcion de kakiu y los animales se convirtieron en duendes?, puedes revertir esto?, que debemos hacer para recuperar a nuestra madre? — seiya, para! —lo interrumpio kakiu—. papa noel, necesita tiempo para responder.la nia miro al hom
e gordo que se encontraba a su lado, anuk permanecia ajena a la situacion.—debido a que no puedes verlo, pues muchos menos escucharlo —kakiu estaba realmente enojada—. asi que yo hablare en nom
e de él —seiya permanencia impaciente—. te diré las respuestas a tus preguntas; veras, cuando trabajamos en el inventario, que se ubica en interior de nuestra casa, osease mia y de mis duendes, en el polo norte, encontraron un objeto y comenzaron a jugar con él, accidentalmente dispararon un rayo, que tal como parece, llego hasta esta zona y producto de eso, las personas se han convertido en duendes, pero, duendes perversos, sin razonamiento ni culpa alguna, son peligros como han visto, la segunda respuesta, es que no afecta a los animales, y ese rayo, está hecho de magia, pero hay magia que es más poderosa que otras, en este caso la magia de poder creer, como kakiu cree en mi, yo fui capaz de protegerla, a excepcion de otras personas, e incluso nios, que no creen en mi, o bien su creencia no es tan fuerte como para lograr que yo pueda hacerme visible ante sus ojos, como para permitirselo—se acallo al ver el rostro de seiya, nuevamente no era el, sin embargo prosiguio—. y como el poder de kakiu al creer en mi, es mucho más poderoso que ningun otro, se me permitio hacerme presente para protegerla, en cuanto a lo otro...—ya veo —respondio seiya cabizbajo, ensom
ecido, el flequillo le cu
ia parte de su rostro—.solo ayudas a aquellos que creen en ti, a nadie más, que ser más interesado y egoista eres —espeto en un tono mordaz, enfurecido.kakiu, no cabia en su asom
o, porque su hermano, aquel joven tan servicial, amable, tranquilo, de repente le era desconocido?, el hom
e a su lado, la devolvio a la realidad y prosiguio hablando en nom
e de él.—te equivocas, joven —asevero—. solo que mi magia, me permite presentarme en un punto, en el que la confianza y la creencia que un corazon deposite en mi sea inmensa, de lo contrario, no tiene derecho, de qué sirve ver algo en lo que no crees?, para qué quieres verlo?, si es algo bueno, debes creer, de lo contrario, la magia se desvanece.seiya, no estaba para nada de acuerdo, ni aquellas pala
as, lograron acallar las penurias de su corazon y modificar aquel semblante frivolo, en el que se encontraba sumergido.—de cualquier manera, seguiré dándote las respuestas —la pequea kakiu kou seguia entonando las pala
as susodichas por papa noel—.por imposible que parezca, mi magia no puede revertir este hechizo, ya que el objeto de creacion, que provoco esta catástrofe, contiene magia negra, y la mi me es insuficiente para combatirlos, solo pude proteger a esta nia, lo demás está fuera de mi alcance —seiya, estuvo a punto de interrumpirlo, sin embargo, la menor prosiguio, no interrumpiria a ninguno de los dos—.sin embargo, existe una persona en este mundo que puede hacerlo —en los ojos de ambos hermanos se ilumino la esperanza, incluso la pequea kou sorprendio al finalizar aquellas pala
as, giro
uscamente la cabeza hacia el hom
e de vestimentas rojas, y este le dijo la respuesta a la pregunta, que ella solo dio a entender a través de sus ojos, consiguiente, kakiu, prosiguio hablándole a seiya—.aquel ser humano debe ser alguien de corazon puro, la persona a la que deben buscar es a la gran hechicera blanca, una bella muchacha de largos cabellos e intensos ojos azules, ella habita en los tiempos, y para dar con ella deben moverse a través de portales.—pero...—aun con su expresion gélida, seiya comenzaba a comprender más a fondo de la situacion, y si eso ameritaba tener que dialogar con papa noel, a través de su hermana, ya que este no podia verlo, e introducirse en un mundo de fantasia, pues, lo haria lo que sea necesario para volver todo a la normalidad—. como se supone que encontraremos a esa mujer?, si comenzamos por su hábitat, hay infinidad de campos y portales que se entrecruzan a través del tiempo, y como es el tiempo, no puede detenerse, como podremos navegar a través de ellos, sin producir, aunque fuese accidentalmente, algun cambio irreversible?—seiya, papa noel me dijo que aquella muchacha tiene una identidad civil, solo debemos encontrarla —la pequea kou callo, para escuchar las pala
as de papa noel, que deberia decir—. como mencione anteriormente, es una chica muy bella de cabellos dorados e intensos ojos azules, es un ser de corazon puro, por lo que será más fácil de encontrar, sin embargo, en su identidad civil, esta no posee ninguno de sus recuerdos como la hechicera blanca, por lo cual, debemos conseguir que se restablezca su memoria —tomo aire para continuar—. segun papa noel, la chica se encuentra en el otro extremo de la ciudad, bastante lejos cabe decir, pero debemos llegar antes de que los duendes invadan tokio completamente, y consecuentemente el mundo.—pero, como haremos para llegar alli sin ser nosotros convertidos en duendes? —inquirio seiya.
—con mi magia podremos —hablo la joven kou nuevamente en nom
e de papa noel—.y junto con mis duendes, los protegeremos a ambos, pero, seiya tu también debes creer —kakiu, imito el mismo tono del hom
e regordete, con cierta tristeza—. como tu hermana cree, seré capaz de protegerlos a ambos, no obstante deben estar cercanos, no pueden alejarse; de lo contrario, me será imposible protegerte a ti, seiya —finalizo con voz potente, dando a entender que más que un consejo, era una orden, que, para su proteccion no debia ser desobedecida.ya era hora, finalizada las dudas, al menos algunas, todos decidieron emprender la marcha, con paso firme, se acercaron a la puerta, deteniéndose unos momentos, seiya tomo fuertemente la mano de kakiu, esta le correspondio en el gesto, a la vez que con su alzaba a anouk y la apegaba a su cuerpo con su
azo li
e. el joven kou, agarro el pomo de la puerta, listo para a
irla, sabiendo a ciencia cierta, que con lo siguiente que se encontraria será con una escena apocaliptica; caos y destruccion, deberian pelear a toda costa, y emergerse en un solo objetivo: regresar todo a la normalidad, antes de que esta nueva realidad los venciera a ellos. sin embargo, lo que menos se espero al a
ir la puerta, es que justo ahi afuera, estuviera un trineo, al menos para kakiu, pues seiya seguia totalmente ajeno ante las maravillas mágicas que se presentaban; debia creer, esa era su unica salvacion, cuándo lo entenderia?— iremos en su trineo?! —exclamo ilusionada la pequea, el de vestimenta rojas solo asintio con una sonrisa en su rostro—qué bien! —y sin esperar permiso ni nada, la nia ya se encontraba sentada en el asiento delantero del trineo. si bien seiya, aun estando ajeno a todo, probablemente ya comprendia lo que sucedia, suspiro, y como hom
e que sabe que no tiene alternativa, decidio sentarse, en lo que se suponia que era un trineo, con la ayuda de kakiu, de lo contrario, realmente no hubiese sabido en que sitio sentarse ni nada.una vez alistados todos, incluso anouk que seguia en
azos de la nia, con seiya a su lado, ambos tomados de la mano, era el unico método en que la magia funcionaria para el joven, papá noel, se dirigio hacia su trineo, y como cualquiera se lo imaginase, le pidio a sus renos que alcen vuelo, si, que alcen vuelo, entonces, el trineo comenzo a elevarse, quedando cada vez más lejos del suelo. kakiu, ilusionada, sorprendida, un tanto alegre a pesar de todo lo ocurrido, seiya; sorprendido, pero aun incrédulo, menos mal que unia su mano con la de su hermana, de lo contrario probablemente se hubiera caido del trineo; más bien no se hubiera subido. luego de unos minutos de apacible silencio, contemplando la inmensidad del cielo, comenzaron a reaparecer aquellos duendes perversos; dispuestos a invadir aquel trineo, con el unico proposito de divertirse y hacer dao, papa noel no dio tregua, el trineo comenzo a moverse a una increible velocidad, con los duendes buenos, oseas los del hom
e repartidor de regalos, protegiendo distintos puntos de él; más que nada a los pasajeros. vueltas que parecian mortales, a una velocidad de la luz, derrapar en curvas, el conductor hacia lo que estuviera a su alcance y más, para poder llegar sanos y salvos a la ciudad, ellos, y que los perversos duendes lograsen quedarse aunque sea varados, al menos hasta encontrar a aquella mujer.los duendes buenos, utilizaban su magia, lanzaban distintos rayos luminosos e incluso bolas de nieve, rodeadas de un extrao fuego rojo, hacia los duendes contrarios; estos a su vez respondian riendo enloquecidos, como si fuera un juego, lanzando rayos oscuros y todo tipo de magia negra, nuevamente dos poderes, dos mundos en juego. seiya, si bien no lograba ver nada, más allá de los duendes malvados, tenia una ligera idea de lo que ocurria, kakiu estaba completamente asustada y a anouk, el viaje no le agradaba nada, sin embargo, todos desconocen el hecho del agotamiento de la magia de esos seres; solo la creencia de kakiu no los abasteceria para continuar con la batalla, debian hacer algo pronto antes de caer bajo la dominacion de los duendes perversos, una decision arriesgada, pero más lo seria el futuro si no tomaban medidas. papa noel, derrapo en una curva, mucho más peligrosa que las anteriores; seiya a
azo fuertemente a kakiu y anouk; al parecer si dirigian hacia un precipicio. a pesar del miedo que la inundaba, kakiu a
io los ojos para saber la situacion actual, al percatarse de las intenciones de papa noel quedo en estado de shock, pero, ella confiaba en él, por cual decidio no decir nada y solo
indarle más del poder de su creencia para que juntos pudieran salir de esto; el trineo cayo profundamente en el interior de la tierra, seguidos por los duendes, y a una velocidad infernal volvio a emerger hacia arriba, una vez alli, los duendes buenos se unieron en ronda, en el medio de eso, se formo una esfera blanca que fue enviada directamente al interior de la tierra, donde se encontraban los perversos duendes, esto los detendria, al menos un rato largo...siguieron su camino, no habia tiempo de descansar. . . .en el otro extremo de tokio, reinaba la paz, ya anochecia, todos disfrutaban de la compaia familiar, algunos, impacientes por la llegada de los regalos, más que nada los nios. una hermosa chica de cabellos dorados y ojos azules, se encontraba cele
ando animadamente con su familia, se podria decir que era ella el rayo de luz y esperanza que necesitaban muchas personas; no solo en época de fiestas, sino, en cualquier momento de su vida, con su alegre personalidad, su bondad, su tierna sonrisa, repartia más luz que los rayos del sol; solamente le faltaba desplegar unas hermosas alas blancas, y ya seria un ángel. so